Documento del Encuentro Memoria Verdad
y Justicia (EMVJ) leído en el acto en Plaza de Mayo el 24 de marzo a 43 años
del golpe genocida
A 43 años
del golpe, estamos en esta Plaza alzando las banderas de una generación que dio
su vida por conquistar una Argentina sin explotación ni opresión. Comprometidos
con esos ideales, frente a los negacionistas de esta Casa Rosada, decimos: ¡30.000 compañeros detenidos-desaparecidos,
presentes!
Venimos a repudiar
el aniquilamiento de decenas de miles de compañeros y compañeras. A repudiar el
terrorismo de Estado, que empezó sus ensayos antes del golpe con el Operativo
Independencia en Tucumán, la Triple A y demás bandas fascistas. A repudiar el
secuestro y tormento de menores, los vuelos de la muerte,
la tortura a las embarazadas, el robo y apropiación de bebés. A repudiar el
modelo que la dictadura impuso: de entrega, de mayor explotación y liquidación
de conquistas obreras, de brutal endeudamiento externo, de violación de cada derecho
y cada libertad democrática. Denunciamos al imperialismo, a los banqueros y a la
oligarquía que planificaron el golpe. A las empresas y dirigentes sindicales
traidores que entregaron cuerpos de delegados enteros, como en Ford, Mercedes
Benz o el Ingenio Ledesma. A la mayoría de la cúpula de la Iglesia que los
bendijo. Al Poder Judicial que los amparó. A los políticos que los avalaron. Y
a los grandes medios cómplices que les lavaron la cara a todos ellos.
La dictadura
instaló más de 600 campos de concentración y ejecutó un plan sistemático para
aniquilar a miles de dirigentes y activistas
obreros y populares que adoptaron diversas formas de lucha. El saldo del
genocidio fueron 30.000 detenidos-desaparecidos y miles de personas presas y
exiliadas. La dictadura quiso liquidar así el vasto movimiento popular que luchaba
por cambios de fondo. Buscó destruir toda forma de organización social: cuerpos
de delegados, centros de estudiantes, organizaciones políticas, barriales,
profesionales, culturales.
Estamos
aquí por los 30.000. Por las vidas que nos quitaron, las familias que
desguazaron y los sueños que nos quisieron robar. Por cada militante, de cada
organización. Por cada grito en la ESMA, el Olimpo, el Vesubio, el Atlético, La
Perla, el Banco, los Pozos de Banfield, Quilmes, Arana, en las escuelitas de
Famaillá, Neuquén, Bahía Blanca, en cada lugar maldito de detención, tortura y
exterminio. Por Azucena Villaflor, Mary Ponce y Esther Balestrino, Madres de
Plaza de Mayo secuestradas y asesinadas. Por Chicha Mariani y por todos los que
aún esperan.Por los intelectuales que no aflojaron. Por las monjas francesas,
los padres palotinos, monseñor Angelelli y demás religiosos desaparecidos. Por
la voluntad inquebrantable de las y los compañeros que aun dentro de los centros
clandestinos impusieron la solidaridad frente al terror. Por quienes al salir
de prisión o cautiverio denunciaron a sus verdugos y testimoniaron por sus compañeras
y compañeros. Por cada activista que se sumó a la resistencia contra la
dictadura,que iniciaron las Madres en esta misma Plaza y que incluyó seis paros
generales. Así nació esta memoria, que reivindicamos. Ydesde acá decimos: ¡son 30.000, fue genocidio!
En estos años de lucha logramos anular las leyes de Punto Final y
Obediencia Debida de Alfonsín, los indultos de Menem, reabrir las causas contra
los genocidas y llevarlos al juicio y castigo. Condenamos a cientos de ellos.
Miles de testimonios dan cuenta de esta historia. Construimos memoria en cada
lugar de trabajo, de estudio, en cada barrio. Desde ya, este enorme movimiento
por los derechos humanos, de tres generaciones luchando codo a codo, recibió golpes.
La desaparición de Julio López en 2006,y el encubrimiento del Estado y el
gobierno a la Bonaerense. Los juicios fragmentados que nos impuso el Poder Judicial,
negándose a juzgar a todos los genocidas por los crímenes cometidos contra todos
los compañeros y compañeras. Y la negación de la mayoría de la justicia a
condenar a los represores por el crimen que cometieron: genocidio.
Pero seguimos aquí, sin
bajar ninguna de nuestras banderas.Por eso desde el Encuentro Memoria, Verdad y
Justicia hemos denunciado al gobierno de los Kirchner, que nombró
a Berni y a Milani. Que montó el Proyecto X de espionaje. Que bajó la edad de imputabilidad
a 16 años. Que elevó el gatillo fácil a uno cada 28 horas, incluida la desaparición
forzada seguida de muerte de Luciano Arruga. Que usó la Gendarmería para
reprimir luchas populares.Y que aprobó la llamada “ley antiterrorista”.
Hoy venimos a denunciar que el gobierno de Macri,
Cambiemos y su ministra Patricia “Bolsonaro” Bullrich es un cambio cualitativo
en el ajuste, la entrega, la impunidad y la represión. Niega el genocidio, lentifica
los juicios y quiso premiar a los genocidas con el 2x1, pero lo derrotamos en
las calles. Este gobierno impulsa el beneficio de la prisión domiciliaria a
casi 100 represores, incluido el Tigre Acosta. Devolvió privilegios a las
FF.AA. y niega sus crímenes. Habilita a las fuerzas de seguridad para la
represión interior, incluidos la dessaparicion seguida de muerte de Santiago Maldonado y el asesinato de Rafael
Nahuel. Construye nuevos “enemigos internos”. Mantiene presas y presos
políticos. Con su doctrina Chocobar autoriza a la policía a disparar por la
espalda, subió el gatillo fácil a uno cada 21 horas y pretende bajar aún más la
edad de imputabilidad. Se arma con picanas Táser y gases tóxicos. Asesinó a
Rodolfo Orellana y Marcos Soria. Y reprime y judicializa más duramente las protestas
sociales.
Además, el escándalo
Stornelli-Ramos Padilla sacó a luz la oscura trama entre gobierno, justicia,
servicios secretos y embajadas extranjeras para espiar, poner jueces más
adictos y montar operaciones políticas. Por eso decimos: ¡Ningún genocida libre!¡Basta de impunidad!¡Libertad a nuestro compañero
Daniel Ruiz!, injustamente preso por enfrentar la reforma jubilatoria el 18
de diciembre de 2017, jornada de lucha que marcó un verdadero hito. ¡Libertad también a Milagro Sala, Luis
D’Elía, Facundo Jones Huala en Chile y
demás presas y presos políticos!
La política de Macri profundiza brutalmente
los bajos salarios y jubilaciones, la flexibilización laboral, los despidos y
suspensiones, los tarifazos de servicios públicos, el recorte de los planes
sociales, el saqueo de las corporaciones y el endeudamiento externo y eterno,
con su consecuencia de hambre y miseria.
El gobierno anterior no rompió con el
FMI y fue “pagador serial” de deuda ilegítima y fraudulenta. A su vez, Macri
pactó un sometimiento total y ahora tenemos al Fondo instalado en las oficinas
del Banco Central monitoreando el ajuste. Por eso decimos: ¡Fuera el FMI! ¡Anulación del acuerdo! ¡No
pago de la deuda externa!
Pero Macri no hace esto solo. Como Cambiemos
no tiene mayoría en el Congreso, pudo aprobar el Presupuesto 2019 de ajuste con
votos de sectores del PJ, el massismo y otros. Y ese ajuste lo aplica no sólo
con Vidal, Larreta y Cornejo, sino con ayuda de los gobernadores cómplices, que
también ajustan y reprimen. Ahí está por ejemplo Urtubey en Salta, que reprime
a los hermanos originarios. Ahí está Alicia Kirchner en Santa Cruz, aplicando
el ajuste. Ahí está Manzur en Tucumán, que como Morales en Jujuy viola los
derechos humanos de niñas violadas y embarazadas. Y hay otros gobernadores,
oficialistas u “opositores”, que actúan igual contra el pueblo. Por eso este 24
de Marzo decimos: ¡No al ajuste y la
represión de Macri, el FMI y los gobernadores cómplices!
Pero la clase trabajadora, las
mujeres, los y las jóvenes y sectores populares estamos lejos de ser derrotados.
Pese al freno y las traiciones de la burocracia sindical, en todos lados se pelea
contra el ajuste. Los ambientalistas resisten el extractivismo y la
contaminación. Los pueblos fumigados resisten los agrotóxicos. Los migrantes
resisten las medidas xenófobas. Las y los trabajadores desocupados, jubilados y
los pueblos originarios defienden sus derechos, y los mapuches acaban de lograr
un fallo absolutorio. Las y los trabajadores del Astillero Río Santiago
lograron frenar la privatización y los despidos. En Télam, FATE, Pilkington, Coca
Cola, Sport Tech, Pedidos Ya, Canale, SIAM y AGR y otras empresas los y las
trabajadoras resisten los despidos y los falsos “procedimientos de crisis”.
¡Sigamos el ejemplo de la docencia
autoconvocada de Salta, que con su lucha conquistó un 40% de aumento
salarial!¡Sigamos el ejemplo de las mujeres y las disidencias, de esa imparable
marea verde, como lo vimos el 8 de Marzo aquí y en todo el país! ¡Esa marea
feminista, que con las jóvenes al frente inunda las calles para exigir aborto
legal, basta de femicidios, presupuesto contra la violencia de género, educación
sexual integral, respeto al protocolode ILE, niñas no madres, no a la trata y
explotación sexual, separación deIglesia y Estado, y demás derechos!
Ante la crisis en Venezuela, en el
Encuentro Memoria, Verdad y Justicia conviven distintas posturas sobre Maduro:desde
apoyo, hasta oposición frontal a su gobierno. Pero todas y todos defendemos el
derecho de ese pueblo hermano a decidir su destino y nos une un mismo grito:¡Fuera yanquis de Venezuela y de América
Latina!
Saludamos al pueblo de Brasil, que
resiste al facho Bolsonaro. A los chalecos amarillos de Francia. Al heroico
pueblo kurdo y los sectores turcos que resisten al dictador Erdogan. A la nueva
primavera árabe de Argelia, Túnez y Sudán. A la heroica Palestina, que una vez
más resiste los ataques militares de Israel.
Hoy volvimos a colmar esta Plaza,
nuestra Plaza, y marchamos en toda la Argentina e incluso en el exterior. No
olvidamos, no perdonamos, no nos reconciliamos. Son 30.000 y Fue genocidio. Basta de impunidad. No al
ajuste y la represión de Macri, el FMI y los gobernadores cómplices.
Y porque siempre traen luz a nuestras
cabezas y fuego a nuestros corazones, gritamos de nuevo: ¡30.000 compañeras y compañeros detenidos-desaparecidos, presentes!
¡Ahora y siempre!